confesiones de una mala madre

De repente me encontré en una situación desconocida para mi, siendo mamá full time y no de uno sino de tres chicos, situación que genera gritos, llantos, peleas, risas, reconciliaciones y revoleo de objetos contundentes.En medio de este caos, y para sentirme un poco menos mal conmigo misma, hice un listado de “9 confesiones de una mala madre” que no son para que el juzgado de menores me saque los chicos pero estoy segura de que cualquier manual de la buena maternidad se horrorizaría y si no son madres, espero que denuncien a sus amigas, hermanas o primas.

1- Nunca esterilizo nada. Lo hice una vez y dios sabrá cuándo será la próxima.

2- Cuando Aby me pide algo siempre le digo “espera un momento que estoy ocupada” a ver si se olvida.

3- A veces olvido cambiarle el pañal a Gael. Intento corregir esto porque me muero de pena cuando le quito el pañal y pesa más que el.

4- Cuando a Aby me piden llevar algo al parque la mitad de las veces me olvido.

5- Digo muchas malas palabras adelante de mis hijos.

6- Le miento al pediatra.

7- Le he limpiado la cara con el dedo gordo chupado. Esto juré y perjuré que nunca lo haría pero tengo que decir que cuando me descubrí haciéndolo me dí cuenta de que era madre.

8- Cuando les corto las uñas casi siempre les corto los deditos.

9- Y el último para que me manden derechito al paredón de fusilamiento de la maternidad: no me gusta dar la teta.